¿Qué es lo que anhela su alma? ¿Anhela hacer mucho dinero? ¿Anhela decirle a su esposo de una vez por todas? ¿Anhela una noche completa de sueño? ¿Anhela hacer las cosas a su manera o expresarse sin reservas? ¡El Salmista anhelaba los atrios del Señor! David anhelaba simplemente pasar tiempo con Dios en la belleza de todo lo que se encontraba en la presencia de Dios.
Usted nunca experimentará el gozo que está destinado para usted, hasta que resuelva este asunto de sus anhelos en la vida. Cuando finalmente anhele la presencia de Dios y hacer las cosas a Su manera y no la suya, es en ese precioso momento que recibirá Su gozo. Cuando finalmente se de cuenta de que su vida no se trata de usted... sino que es acerca de Él... es que experimentará la rica satisfacción del gozo que se encuentra solo en Su presencia. Los anhelos más profundos y más urgentes sólo serán satisfechos por Él.
Espero que usted haya experimentado la increíble satisfacción que viene de cantar una canción de alabanza a Dios. La próxima vez que se "sienta" como que va a explotar en enojo... ¿qué tal si en lugar de eso canta una canción de alabanza? La próxima vez que "sienta" decir su lado de la historia... ¿qué tal si inclina su cabeza y permite que las palabras de un himno traigan paz a su alma? La próxima vez que sea criticado por su compañera de trabajo... ¿qué tal si tararea una canción de adoración en voz baja?
Reprograme sus respuesta de enojo a canción... de frustración a adoración... de impaciencia a alabanza. A Dios sí le importa como nosotros respondemos a estos asuntos cotidianos de la vida, y yo, como el Salmista de hace mucho tiempo, escogeré cantar!
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