top of page
Buscar

Más que un toque

  • Foto del escritor: Gabriela Lizeth Figueroa
    Gabriela Lizeth Figueroa
  • 13 jul 2020
  • 1 Min. de lectura


Mateo 8:1-4 nos narra la historia de como un leproso fue limpiado.


En tiempos bíblicos una persona con lepra era considerada inmunda, quien tocará un leproso era considerado impuro y culpable.


El hombre con lepra desesperado por sucondición, corrió y se postró ante el Señor Jesús diciendo: Señor, si quieres puedes limpiarme. El Señor Jesús extendió la mano y le tocó, diciendo: Quiero; se limpio y al instante su lepra desapareció.


El Señor escogió tocar al leproso para limpiarlo. Así como escogió morir en un madero para salvarnos.


Acerquemonos hoy a El con un corazón humilde y pidamos que nos limpie, pues aunque nuestra lepra no es física es espiritual, reconozcamos tal como el leproso que sólo El puede limpiarnos, pues nuestros corazones están manchados a causa del pecado que nos separa de Dios y ningún sacrificio humano es capaz de purificarnos sino sólo Su sangre. Su respuesta es aún: Quiero, se limpio.

 
 
 

Comentarios


Post: Blog2_Post

©2019 por Sembradores de Esperanza. Creada con Wix.com

bottom of page